Inalcanzable

Como ocurría en los tiempos de Supergarcia hubo que esperar a la hora cero para que saltara la noticia. A última hora de la tarde del sábado pasado había empezado a circular por Internet una portada de El Mundo en la que se informaba de que la edición del domingo 31 de enero estaba embargada hasta las 00.30h. Hasta ese momento no supimos exactamente cuánto dinero le cuesta al FC Barcelona tener en nómina a Messi, el mejor futbolista de la historia.

A partir de cuatro dígitos, tantos como tiene una matrícula de coche, yo marco una línea que separa lo que es mucho de muchísimo. En el otro extremo sitúo lo que me parece poco y poquísimo. Como ven, prefiero las letras antes que las cifras así que aquí me tienen haciendo de junta letras, como diría José Maria Garcia.

En cuanto se publicó la noticia de que Messi cobra muchísimo dinero, más que cualquier otro futbolista del mundo, se empezaron a oír voces de gente opinando, tanto en la radio como en las redes sociales. Los comentarios se sucedieron el domingo, el lunes, el martes y se supone que continuaran durante las próximas semanas porque estamos ante un tema de tal magnitud que otras historias se quedan en segundo plano.

No puede ser. Por eso, pido un momento de atención, aunque sea un minuto, para destacar historias extraordinarias, como la que sucedió el domingo pasado con ocasión del mundial de ciclo Cross, un título que en los últimos siete años se reparten Van der Poel, ganador de la última prueba, o Van Aert, segundo clasificado.

Van der Poel y Van Aert lucharon por la victoria en un circuito de tierra, barro y agua, y protagonizaron escenas como las que se vieron cuando corrían por la orilla de la playa de Ostende (Bélgica). ¿Cómo es posible pedalear sobre ese terreno? Definitivamente, hay cosas inalcanzables para el común de los mortales.

Foto: Tornanti.cc